¡DALGONA con MILO®: Una receta ligera y cremosa!
La receta de Dalgona con MILO® es una receta ligera y cremosa que combina la delicata textura de la crema de leche con el sabor dulce y ligeramente amargo del MILO®. Esta receta es ideal para aquellos que buscan un sabor agradable sin ser demasiado intenso. La preparación es rápida y sencilla, lo que la convierte en una opción ideal para una comida rápida.
Preparación de la crema de leche
Preparar la crema de leche es la primer etapa clave de la receta de Dalgona con MILO®. Para preparar la crema de leche, se mezcla la leche con un poco de azúcar y se deja reposar durante 30 minutos. Durante este tiempo, se realiza la coagulación de la leche, lo que significa que se forman pequeñas celulas que se entrelazarán entre sí.
Subsequently, la leche se se pasa por una máquina de lavagem o se macea con un paño limpio. La crema de leche debe ser cuidadosamente enfriada, ya que si se deja demasiado fría, se perderá su textura y sabor.
Adición de MILO®
La adición de MILO® en etapas a lo largo del proceso de preparación es la técnica que permite a la crema de leche adquirir el sabor y el textura que caracterizan a la Dalgona. MILO® es una proteína de origen vegetal que aporta un sabor dulce y ligeramente amargo. Se dice que el MILO® tiene un perfil similar al sabor del leche, por lo que se puede agregar al leche fresco sin que se disuelva completamente.
Con la addition del MILO®, se realiza una doble cocción, donde la leche se coge y luego se se deja reposar. La técnica de doble cocción permite que se integrara el MILO® con la leche y se obtenga una mezcla cremosa y suave.
Es importante controlar la cantidad de MILO® que se agrega, ya que la cantidad afecta el sabor y la textura de la Dalgona.
Creamar la crema
La crema de leche debe ser preparada con cuidado, ya que la leche tiene un alto contenido de proteínas. La temperatura ideal para la preparación de la crema de leche es entre 100-110°F (38-43°C). Si la temperatura de la leche excede los 110°F (43°C), puede provocar que se formaran grandes bolliciones de leche, lo que puede afectar la textura y el sabor de la crema.
Con la crema preparada, se debe dejar reposar durante 30 minutos para permitir que se formen las celulas de leche. Después del reposar, la crema de leche debe ser cuidadosamente enfriada para evitar que se vuelva demasiado fría y pierda su textura.
Incorporación del MILO®
La incorporación del MILO® en la crema de leche está realizada en etapas. Primero, se mezcla la leche con un poco de azúcar y se deja reposar durante 30 minutos. Durante este tiempo, se realiza la coagulación de la leche, lo que significa que se forman pequeñas celulas que se entrelazarán entre sí.
Preparación final
La crema de leche ya preparada se debe batir con un creamer o un molino hasta que esté homogénea. El milo debe ser ligeramente más duro que el leche, ya que la cremación puede hacer que el milo se disuelva completamente.
La crema de leche es luego se calienta en una panela o hervidor hasta que alcance una temperatura entre 100-110°F (38-43°C). Esta temperatura es ideal para la cooking de la Dalgona.
En resumen
La receta de Dalgona con MILO® es una receta sencilla y rápida que permite a los consumidores disfrutar de un sabor agradable sin ser demasiado intenso. La preparación de la crema de leche es la etapa más importante de la receta, ya que determina el sabor y la textura de la Dalgona. La adición del MILO® en etapas a lo largo del proceso de preparación también aporta un sabor dulce y ligeramente amargo al plato. La crema de leche debe ser cuidadosamente preparada para evitar que se vuelva demasiado fría y pierda su textura.
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