Cómo hacer Mole sencillo Tutorial

El mole es uno de los platillos más representativos de la gastronomía mexicana. Este delicioso platillo se caracteriza por su sabor agridulce y picante, así como por su textura espesa y cremosa. Sin embargo, muchas personas piensan que hacer mole es complicado y requiere de mucho tiempo y esfuerzo. En este tutorial, te enseñaremos cómo hacer mole sencillo de manera fácil y rápida, utilizando ingredientes que puedes encontrar en cualquier tienda de abarrotes. Verás que con unos pocos pasos podrás sorprender a tus amigos y familiares con un delicioso platillo que no podrán resistir. ¡Comencemos!
El Mole es una de las recetas más emblemáticas de la gastronomía mexicana, y uno de los platillos más populares en todo el mundo. Este guiso tradicional es una combinación deliciosa de sabores y texturas, y se puede preparar de muchas maneras diferentes.

Si bien el Mole tradicional puede ser un poco complicado de hacer, existen muchas formas de simplificar el proceso y preparar un Mole sencillo y delicioso. En este tutorial, te enseñaremos cómo hacer Mole paso a paso, con ingredientes fáciles de encontrar y una receta fácil de seguir.

Ingredientes:

- 2 chiles anchos
- 2 chiles pasilla
- 2 chiles mulato
- 1 tomate
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1/4 taza de almendras
- 1/4 taza de cacahuates
- 1/4 taza de pasas
- 1/4 taza de ajonjolí
- 1 tortilla de maíz
- 1/4 taza de aceite vegetal
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de comino
- 1 cucharadita de canela
- 1 cucharadita de orégano
- 1 litro de caldo de pollo

Paso 1: Comienza por tostar los chiles y las semillas. Para ello, ponlos en una sartén a fuego medio y remueve con frecuencia hasta que estén ligeramente tostados. Retira del fuego y déjalos enfriar.

Paso 2: Tuesta también el tomate, la cebolla y el ajo en la misma sartén. Cuando estén dorados, retíralos del fuego y déjalos enfriar.

Paso 3: Una vez que todo esté frío, pon los chiles y las semillas en una licuadora junto con el tomate, la cebolla y el ajo. Agrega también las almendras, los cacahuates, las pasas y el ajonjolí. Licúa todo hasta obtener una pasta suave.

Paso 4: Calienta el aceite en una olla grande y agrega la pasta de chiles. Cocina a fuego medio durante unos 10 minutos, removiendo con frecuencia para evitar que se queme.

Paso 5: Agrega la tortilla de maíz y el caldo de pollo a la olla y mezcla bien. Añade la sal, el comino, la canela y el orégano, y mezcla de nuevo.

Paso 6: Deja que el Mole hierva a fuego lento durante unos 30 minutos, o hasta que espese y los sabores se hayan mezclado bien.

Paso 7: Sirve caliente con pollo, arroz y tortillas de maíz.

Este Mole sencillo es fácil de hacer y muy delicioso. Además, puedes ajustar los ingredientes a tu gusto y añadir más o menos chiles según lo picante que quieras el guiso. ¡Inténtalo en casa y sorprende a tus amigos y familiares con esta receta tradicional mexicana!

¿Cómo se hacía el mole?

El mole es un platillo típico de México que se ha convertido en un símbolo de la gastronomía mexicana. Se trata de una salsa espesa y compleja que se utiliza para acompañar una gran variedad de platillos, desde carne hasta huevos y verduras.

La preparación del mole es un proceso largo y laborioso que requiere de una gran cantidad de ingredientes y una técnica muy específica. Aunque existen muchas variaciones regionales, la base del mole siempre incluye chiles secos, especias y chocolate.

Para empezar a hacer el mole, se deben tostar los chiles secos en un comal o sartén hasta que estén ligeramente quemados. Luego, se deben remojar en agua caliente para ablandarlos y retirarles las semillas y venas.

Una vez que los chiles están listos, se deben cocinar con otros ingredientes como cebolla, ajo, tomates y especias, en una olla con agua hasta que estén bien suaves. A continuación, se deben licuar todos los ingredientes hasta obtener una salsa homogénea.

En una cazuela aparte, se debe derretir el chocolate y agregar la salsa de chiles poco a poco, revolviendo constantemente para evitar que se pegue. El proceso de agregar la salsa de chiles debe hacerse de manera gradual para que la mezcla no se corte.

Finalmente, se debe cocinar el mole a fuego lento durante varias horas, removiendo de vez en cuando, para que los sabores se integren y la salsa espese. El resultado es un mole suave y sedoso, con un sabor agridulce y picante que es irresistible.

Es importante mencionar que el mole es un platillo que se ha ido perfeccionando a lo largo de los años y que cada región de México tiene su propia versión. Algunos moles incluyen más ingredientes, como frutas secas y semillas, mientras que otros son más picantes o dulces.

Este platillo es un ejemplo de la riqueza y variedad de la gastronomía mexicana.

¿Qué contiene el mole mexicano?

El mole es uno de los platillos más emblemáticos de la gastronomía mexicana. Se trata de una salsa espesa y compleja que se utiliza para acompañar carnes, pollo, arroz y otros platillos. El mole es una mezcla de distintos ingredientes que le dan su sabor característico y su textura única. En este artículo te explicamos qué contiene el mole mexicano.

Ingredientes principales del mole mexicano

El mole mexicano es una mezcla de ingredientes que incluyen chiles, especias, frutos secos, pan, tortillas, chocolate y otros ingredientes. Los ingredientes pueden variar dependiendo de la región de México en la que se prepare el mole, pero algunos de los ingredientes más comunes son:

• Chiles secos: Los chiles secos son el ingrediente principal del mole mexicano. Algunos de los chiles más utilizados son el ancho, el pasilla y el mulato. Los chiles se tuestan y se remojan en agua caliente antes de ser molidos para hacer la salsa.
• Especias: El mole mexicano incluye una mezcla de especias que varía según la receta. Algunas de las especias más comunes son el comino, el clavo de olor, la canela, el orégano y el tomillo.
• Frutos secos: Los frutos secos como las almendras, las nueces y las semillas de ajonjolí se tuestan y se muelen para darle sabor y textura al mole.
• Pan y tortillas: El pan y las tortillas se tuestan y se muelen para espesar el mole y darle cuerpo.
• Chocolate: El chocolate es un ingrediente opcional en el mole mexicano, pero le da un sabor característico y un toque de dulzor a la salsa.

Variaciones regionales del mole mexicano

El mole mexicano varía según la región de México en la que se prepare. Algunas de las variaciones más conocidas son:

• Mole poblano: El mole poblano es uno de los más conocidos. Se prepara con chiles secos, especias, frutos secos, pan, tortillas y chocolate.
• Mole negro: El mole negro es originario de Oaxaca y se prepara con chiles secos, especias, frutos secos, pan, tortillas y chocolate. Se caracteriza por su color oscuro y su sabor intenso.
• Mole rojo: El mole rojo es originario de Michoacán y se prepara con chiles secos, especias, frutos secos, pan y tortillas. No lleva chocolate.
• Mole verde: El mole verde se prepara con chiles verdes, especias, frutos secos, pan y tortillas. Se suele utilizar para acompañar carne de cerdo.

El mole varía según la región de México en la que se prepare y cada variación tiene su sabor y textura únicos. Si quieres probar el auténtico sabor del mole mexicano, te recomendamos que lo pruebes en un restaurante mexicano o que prepares tu propia receta en casa.

¿Cuál es el mole más rico de México?

El mole es uno de los platillos más representativos de la gastronomía mexicana. Se caracteriza por su sabor agridulce y picante, y es considerado una delicia para el paladar.

En México, existen diferentes tipos de mole, cada uno con su propia receta y sabor. Sin embargo, uno de los más populares y reconocidos es el mole poblano.

El mole poblano se originó en la ciudad de Puebla, durante la época colonial. Se dice que fue creado por las monjas del Convento de Santa Rosa y que su receta original incluía más de 20 ingredientes.

Algunos de los ingredientes que se utilizan en la preparación del mole poblano son: chiles poblanos, chocolate, especias como el comino y el clavo, almendras, ajonjolí y pasas.

Una de las características del mole poblano es su complejidad de sabores, ya que combina ingredientes dulces, picantes y salados. Además, su textura es suave y cremosa.

El mole poblano es un platillo que se puede disfrutar en diferentes ocasiones, desde una cena en familia hasta en eventos especiales como bodas y fiestas patrias.

Aunque el mole poblano es el más reconocido, existen otros tipos de mole que también son deliciosos, como el mole negro oaxaqueño, el mole rojo de Michoacán y el mole verde de Guerrero.

Su complejidad de sabores y su textura suave lo hacen único y especial. Sin embargo, cada tipo de mole tiene su propia historia y sabor, por lo que es recomendable probarlos todos.

¿Qué tipo de moles hay?

Los moles son un platillo muy popular en la cocina mexicana y consisten en una deliciosa salsa espesa que se suele acompañar con carne, pollo, pescado o incluso verduras. Aunque el ingrediente principal de los moles es el chile, existen diferentes tipos de moles que se distinguen por los ingredientes que se utilizan en su preparación.

Mole Poblano

El Mole Poblano es el más conocido y se origina en el estado de Puebla. Su preparación es compleja y se necesitan más de 20 ingredientes para su elaboración, entre los cuales destacan el chile ancho, chile mulato, chile pasilla, semillas de sésamo, clavo, canela, tomate, plátano, pan, ajonjolí y chocolate. Se suele acompañar con pollo y se considera uno de los platillos más representativos de la gastronomía mexicana.

Mole Negro

El Mole Negro es originario de Oaxaca y se caracteriza por su color oscuro y su sabor intenso. Su preparación es similar al mole poblano, pero se utiliza chile chilhuacle negro, que le da su característico color. Se suele acompañar con carne de res o de cerdo.

Mole Verde

El Mole Verde es originario de la región de Tlaxcala y se elabora con una mezcla de chiles verdes, cilantro, epazote, ajo, cebolla y tomate verde. Su sabor es fresco y suave y se suele acompañar con carne de cerdo o pollo.

Mole Rojo

El Mole Rojo es originario del estado de Guerrero y se elabora con chiles guajillo, ancho y pasilla, así como con especias como comino, clavo y canela. Se suele acompañar con carne de cerdo o pollo y su sabor es ligeramente picante.

Mole Amarillo

El Mole Amarillo es originario de Oaxaca y se elabora con chile guajillo, ajo, cebolla, tomate, hojas de aguacate y especias como el comino y el orégano. Su sabor es suave y se suele acompañar con pollo o pescado.

La preparación de los moles es un arte y requiere de tiempo y paciencia para lograr su delicioso sabor y textura.

En conclusión, el mole es un platillo muy tradicional y popular en la gastronomía mexicana, y aunque pueda parecer complicado de preparar, con este tutorial de mole sencillo podrás sorprender a tus amigos y familiares con un delicioso platillo en cualquier ocasión. ¡Anímate a prepararlo y disfrutar de su exquisito sabor!